Historia
En el año 1966 Albert Thiemann fundó una empresa "dedicada a la comercialización de bicicletas y artículos técnicos". Desde entonces, han pasado muchas cosas. Entre otras, que ese distribuidor de bicicletas y piezas de recambio se ha convertido en una empresa fabricante de E-Bikes y bicicletas que opera en todo el mundo. El crecimiento continuo y la especialización en productos personalizados le han valido a VELO DE VILLE el éxito tanto en el exigente mercado alemán como en el resto de Europa. Todo ello sin olvidar en ningún momento nuestros valores fundamentales de proximidad, singularidad y diversidad, a los cuales hemos permanecido fieles durante todos estos años.
"Hay quien mide el éxito por los resultados empresariales. Para nosotros, el éxito es mucho más que esto. La satisfacción de nuestros empleados y empleadas es nuestro mayor logro. Y el mayor capital de nuestra empresa. Su lealtad, su enorme pasión y su espíritu de equipo han hecho de VELO DE VILLE la empresa que es hoy."
LOS INICIOS
En 1966 se había desatado la fiebre automovilística: todo el mundo quería tener un coche. Y por si esto fuera poco, en la ciudad de Münster y alrededores ya operaban más de veinticinco grandes distribuidores de bicicletas. Que no eran, precisamente, las mejores condiciones para entrar con éxito en el negocio se hizo evidente en el "apoyo" recibido para arrancar el proyecto: ninguno. Pero Albert Thiemann y Franz Ferlmann no se desanimaron y decidieron constituir, con sus propios medios, una empresa "dedicada a la comercialización de bicicletas y artículos técnicos", según reza la única página que conforma las escrituras de la sociedad.
Los dos socios aportaron como capital inicial sus respectivos coches particulares, que cambiaron por una furgoneta de reparto. Poco después alquilaron un pequeño edificio en Altenberge a modo de almacén.
En sus inicios, la actividad principal de la empresa era la importación de bicicletas procedentes de los Países Bajos. Las bicicletas se vendían después a pequeños comercios de la ciudad de Münster y alrededores, por lo que, según los estándares actuales, se trataba de un negocio de ámbito muy local.
EL NEGOCIO DESPEGA
El crecimiento continuo del negocio hizo que, a principios de los años setenta, las instalaciones de la empresa se quedaran pequeñas. En 1972 la sociedad invirtió en un edificio más grande y construyó un nuevo almacén de 1000 metros cuadrados.
La crisis del petróleo y los "domingos sin coches" propiciaron, en el año 1973, el primer boom de la bicicleta. Fue la primera vez que agotamos todas las existencias. A raíz de este boom, en 1975 ampliamos de nuevo las instalaciones con 400 metros cuadrados más.
CAMBIO DE PIÑÓN
En 1978 Albert Thiemann abandonó la sociedad para, en tan solo unas semanas, fundar su propia empresa de distribución de bicicletas: Albert Thiemann Fahrradgroßhandel. Para ello, decidió alquilar de nuevo el antiguo almacén de Altenberge. Gracias a su amplia red de contactos con clientes y proveedores, el negocio floreció de nuevo rápidamente y tuvo que alquilar espacios de almacenamiento adicionales en las localidades vecinas.
De distribuidor a fabricante: el principio "Custom Made"
En 1980 Albert Thiemann decidió comprar un gigantesco recinto de 10.500 metros cuadrados en la calle Boschstraße de Altenberge y construir una nueva sede de 2.000 metros cuadrados, a la que la empresa se trasladó en 1982. En ese entonces estábamos convencidos de que aquel recinto tenía capacidad suficiente para aguantar, por lo menos, cincuenta años más. Nos equivocamos: no fueron cincuenta, aunque sí treinta y tres años el tiempo que la empresa estuvo allí. La visionaria compra del recinto y la construcción de la nueva sede no fueron, sin embargo, las únicas decisiones estratégicas importantes de aquella época. Hubo una, en concreto, que cambió por siempre el rumbo de la empresa: la decisión de empezar a ensamblar nuestras propias bicicletas.
Y lo hicimos con la idea clara, ya desde el principio, de crear productos hechos a medida.
En aquel entonces, ofrecer bicicletas con diferentes tallas de cuadro que se ajustaran a cualquier estatura era toda una novedad. Para remarcar este rasgo diferencial, en nuestro primero showroom exhibimos, una al lado de otra, una bicicleta con una talla de cuadro de 45 y otra de 70.
Las diferentes tallas y colores del cuadro y la variedad de colores de los guardabarros y cables de freno constituyeron el nacimiento de nuestro principio "Custom Made". Desde entonces, el concepto Custom Made forma parte de nuestro ADN.
Un negocio familiar
En 1987 el edificio existente se amplió con 1.000 metros cuadrados de exposición. La venta minorista de bicicletas, que desde la fundación de la empresa había sido una fuente de ingresos adicional, contó por primera vez con un espacio propio.
Ese mismo año Albert Thiemann y Edith Beglet-Thiemann constituyeron la sociedad AT Zweirad Handels GmbH, con un capital inicial de 75.000 marcos alemanes y todas las operaciones comerciales de la empresa Albert Thiemann Fahrradgroßhandel.
A finales de los ochenta la empresa empezó a adquirir componentes clave como, por ejemplo, cuadros de bicicleta, para lo cual inició una colaboración con la empresa Recker de Meckenheim. A pesar de que también ensamblaba sus propias bicicletas, Recker no constituía una competencia directa en términos de ventas, puesto que su actividad comercial se centraba principalmente en el sur de Alemania. Por nuestra parte, a principios de los ochenta habíamos decidido ampliar nuestro radio de acción de la Llanura de Münster a los territorios situados al norte de Colonia, es decir, a la Alemania del norte.
Segunda generación
En 1992 Volker Thiemann se incorporó a AT Zweirad Handels GmbH en calidad de socio y administrador en el marco de una ampliación de capital que también conllevó un cambio de nombre: AT Zweirad GmbH.
Nuestro primer cuadro de bicicleta
A mediados de los noventa desarrollamos nuestro primer cuadro "propio" de bicicleta, que bautizamos con el nombre de UNA y que se convirtió en el primer cuadro monotubo del mercado; por así decirlo, el embrión de todas las bicicletas urbanas. El cuadro UNA fue rápidamente copiado y, en la siguiente IFMA, una importante empresa competidora presentó su "propio" cuadro monotubo con el revelador nombre de "UNO".
EXPLOSIÓN DE COLOR
Para ampliar aún más las posibilidades de personalización de nuestros productos, en 1998 decidimos construir nuestra propia planta de pintura electrostática en un nuevo anexo de 1.000 metros cuadrados de superficie. Esta nueva instalación nos permitió empezar a suministrar cuadros pintados también a nuestros colaboradores Recker, Strauch y Kirsch. La planta de pintura electrostática fue la segunda decisión estratégica más importante en la historia de la empresa. Aparte de poder reaccionar más rápidamente a los cambios en el mercado, esta nueva instalación nos permitió mostrar claramente al mundo que habíamos dejado de ser simples distribuidores de bicicletas para convertirnos en fabricantes.
LA UNIÓN HACE LA FUERZA
En el año 2001 el propietario de la empresa Recker se jubiló, y VELO DE VILLE decidió adquirir sus operaciones comerciales. Esto nos permitió llegar por primera vez a todo el territorio alemán y alcanzar un nuevo hito en la historia de la empresa.
En los años siguientes continuamos invirtiendo en la flexibilización de la producción.
La despedida
El 10 de junio de 2006 no fue un día como los demás. Ese día, Albert Thiemann entró por última vez en las instalaciones de la calle Boschstraße de la empresa que fundara. El 24 de junio de 2006 se produjo la despedida definitiva, aunque su espíritu pionero, su sabiduría, su psicología y su gran humanidad permanecerán para siempre con nosotros. De él hemos aprendido que lo más importante de una empresa son las personas que hay detrás de ella, y estamos convencidos de que también las próximas generaciones seguirán siendo fieles a su espíritu.
Una nueva movilidad
En 2009 lanzamos nuestra primera pedelec, la E40, predecesora de nuestra serie CEB 400, y al año siguiente dedicamos un folleto en exclusiva a esta modalidad de bicicleta. Datan de ese entonces las series E20, E40 y E 80, con las que ya ofrecíamos pedelecs urbanas, de trekking y deportivas.
En los siguientes años las pedelecs se convertirían en el motor de crecimiento de nuestra empresa.
Nuestros vecinos europeos
En el año 2010 decidimos iniciar el negocio de exportación de productos a los países vecinos, empezando por Francia y Bélgica. A partir de ahí, impulsamos una estrategia continua de expansión a nuevos mercados.
Esto propició un crecimiento exponencial del negocio, y pronto se hizo evidente que el recinto de la Boschstraße se iba a quedar pequeño en breve. Seguir ampliando las instalaciones existentes no era ya una opción viable, por lo que decidimos construir un cuartel general completamente nuevo que fuera capaz de sustentar el crecimiento futuro de la empresa.
Nuestro nuevo hogar
En enero de 2015 la empresa se traslada en bloque al número 2 de la calle Steinkuhle de Altenberge. Las nuevas instalaciones ocupan una superficie total de alrededor de 8.800 metros cuadrados. Poco después del traslado, la empresa invierte en una segunda planta de pintura electrostática, dos nuevas líneas de ensamblaje, una línea de fabricación de cubiertas y nuevas tecnologías de almacén.
Los primeros días en el nuevo emplazamiento fueron algo accidentados y conllevaron, para todos los implicados, largas noches sin dormir. Al cabo de unas semanas, sin embargo, los problemas iniciales quedaron solventados y, desde entonces, los procesos de producción se han optimizado constantemente.
El traslado a las nuevas instalaciones supuso otro punto de inflexión en la historia de éxitos de la empresa.
La empresa hoy: la tercera generación invierte en el futuro
En el año 2020 la tercera generación de la familia, representada por Alain Thiemann, asumía la dirección ejecutiva de la empresa de la mano de Edith Beglet-Thiemann, que abandonaba su puesto para incorporarse al consejo asesor de la sociedad.
Ese mismo año construimos una nueva planta de producción de 5.400 metros cuadrados y ampliamos la zona de oficinas en alrededor de 600 metros cuadrados. Las instalaciones de la empresa ocupan ahora una superficie total de 14.200 metros cuadrados. Al mismo tiempo realizamos importantes inversiones en tecnologías de producción para ampliar nuestras capacidades y mejorar aún más la eficiencia de la cadena de montaje. Las nuevas instalaciones, que estarán plenamente operativas en verano de 2021, se contarán entre las más modernas de Europa.
Nuestra empresa familiar no ha dejado de crecer en los últimos años y actualmente emplea a más de 150 trabajadoras y trabajadores. Somos una empresa multicultural formada por profesionales de más de 20 nacionalidades distintas. Más de un 10 % de nuestra plantilla la componen personas con diversidad funcional que se encuentran plenamente integradas en nuestra operativa diaria y que son parte esencial de nuestro éxito. Estamos convencidos de que esta diversidad es el activo principal de nuestra empresa para seguir teniendo éxito en el futuro.
A partir del know-how atesorado durante años mejoramos continuamente la calidad y desarrollamos nuevos modelos, funciones y diseños. Nuestra pasión por la bicicleta y la elevada dedicación y compromiso de todo nuestro equipo son los pilares fundamentales sobre los que seguiremos escribiendo nuestra historia de éxitos.
Neue Generation - Neue Herausforderungen
Seit dem 01.07.2024 ist Moritz Thiemann, Sohn von Volker Thiemann und Enkel von Albert Thiemann, als neuer Geschäftsführer bei VELO DE VILLE eingestiegen. Mit seinem Eintritt vergrößert sich die Geschäftsführung auf drei Köpfe, um den weiteren Herausforderungen und der Unternehmensgröße gerecht zu werden. Fun Fact: alle aktuellen drei Geschäftsführer haben im Alter von 28 Jahren in der Geschäftsführung angefangen. Dies unterstreicht das Vertrauen in die junge Generation und deren Fähigkeit, das Unternehmen mit frischen Ideen und bewährten Werten in die Zukunft zu führen.